¿Qué es la fibrilación auricular? La fibrilación auricular es un tipo de arritmia cardíaca en la que los latidos del corazón son irregulares. En lugar de latir de manera regular y constante, las aurículas del corazón se contraen de forma rápida y caótica, lo que puede afectar la capacidad del corazón para bombear sangre de manera eficiente.
Se trata de una enfermedad grave ya que puede producir coágulos de sangre que pueden ir desde el corazón hasta el cerebro y provocar un infarto cerebral. Gracias a los avances médicos, existen tratamientos para esta enfermedad.
Causas de la fibrilación auricular
La fibrilación auricular puede ser causada como consecuencia de algún tipo de alteración o daño en las aurículas. Podemos destacar:
- Problemas estructurales del corazón. Los problemas con la estructura del corazón son una causa frecuente de la fibrilación auricular. Esto puede incluir enfermedades cardíacas como la enfermedad de las arterias coronarias, la enfermedad valvular cardíaca o los defectos cardíacos congénitos.
- Cambios en el tejido cardíaco. También puede ser el resultado de cambios en el tejido cardíaco o en las señales eléctricas que controlan el ritmo cardíaco. Estos cambios pueden ser causados por enfermedades cardíacas, hipertensión arterial o daño al corazón debido a otras condiciones médicas.
- Factores de riesgo. Algunos factores de riesgo pueden aumentar las probabilidades de desarrollar fibrilación auricular. Estos incluyen la edad (especialmente a partir de los 40 años), factores cardiovasculares (hipertensión arterial), enfermedades cardiovasculares previas o factor hereditario (tener un familiar directo con fibrilación auricular), entre otras.
Síntomas de la fibrilación auricular
La fibrilación auricular puede variar en su presentación y gravedad. Algunas personas pueden no experimentar ningún síntoma. De hecho, se les diagnostica esta enfermedad al realizarle un electrocardiograma o durante una revisión rutinaria. En cambio, otros pueden experimentar síntomas significativos.
Uno de los síntomas más frecuentes son las palpitaciones. Es la sensación de que el corazón late rápido, fuerte. Puede desaparecer a los pocos minutos u horas. También puede mantenerse durante largos períodos de tiempo. Si la frecuencia cardiaca es muy alta o baja, se puede tener sensación de mareo, desmayo e incluso de pérdida de conocimiento.
A menudo, provoca síntomas poco claros como sensación de cansancio o fatiga.
Diagnósticos de la fibrilación auricular
El electrocardiograma es la única prueba necesaria para diagnosticar la fibrilación auricular. Se registra la actividad eléctrica del corazón y se valora el ritmo cardiaco.
Otra prueba es el holter, un electrocardiograma de forma continuada durante 24 o 48 horas. Indicado para diagnosticar episodios de corta duración o que no causen síntomas.
Por último, el ecocardiograma para obtener imágenes del corazón en movimiento.
Para más información sobre la fibrilación auricular, si estás buscando una segunda opinión médica o buscas una clínica en Madrid para realizarte las pruebas de diagnóstico de esta enfermedad, contacta con el Dr. Ignacio Plaza Pérez.